Movilizaciones en el CHUAC contra las agresiones, en A Coruña
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Protestas en el CHUAC de A Coruña tras cumplir 50 días de la agresión en urgencias
La Junta de Personal reclama medidas preventivas urgentes y protocolos específicos ante la falta de soluciones por parte de la gerencia del hospital
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El CHUAC volvió a temblar esta mañana en A Coruña. Más de 50 días después de la agresión ocurrida en el servicio de urgencias en la que un paciente agredió a dos trabajadores, el hospital se convirtió de nuevo en el escenario de protesta para reclamar respuestas y soluciones a una situación que, dicen, sigue sin resolverse.
A la protesta se unieron también compañeros de los centros de atención primaria de la ciudad, así como personal del Hospital Virxe da Xunqueira en Cee. Todos ellos coinciden en una demanda común: la necesidad urgente de medidas preventivas y la creación de protocolos específicos que garanticen la seguridad de los profesionales y pacientes.
Desde la Xunta de personal del área sanitaria de A Coruña y Cee, detallaron que en la reunión del comité de seguridad y salud del pasado 25 de marzo, la gerencia entregó un "informe causa-raíz" que, según indican, llegó incompleto. "Solo se entregaron las conclusiones del informe a los delegados de prevención, sin detallar las acciones concretas que se llevarán a cabo", explicaron en un comunicado previo a la concentración de este jueves.
Estas conclusiones, sin embargo, coinciden con las demandas que tanto la Junta de Personal como los trabajadores del servicio llevan meses formulando: establecer medidas preventivas y crear protocolos para evitar que situaciones similares vuelvan a ocurrir.
La respuesta de la gerencia fue clara: seguir esperando. Esta falta de acción ha sido calificada por los trabajadores como "una tomadura de pelo". "No se ha establecido ni siquiera una programación sobre cuándo se implementarán estas medidas, lo que ha aumentado la frustración del personal sanitario, que teme que un incidente similar pueda repetirse en cualquier momento".
"Protocolos insuficientes"
Durante la misma reunión, la gerencia presentó un "protocolo de actuación en urgencias del paciente potencialmente agitado". Sin embargo, este protocolo fue criticado por no contar con la participación de los profesionales del servicio y por ser completamente inespecífico en su contenido. La Inspección de Trabajo, al revisar el protocolo, indicó el 26 de marzo que el documento no es útil y ha abierto un plazo de dos meses para la elaboración de un nuevo protocolo que sea efectivo.
Reunión urgente solicitada con la gerencia
Con ello, la Junta de Personal solicitó nuevamente una reunión con la gerencia, considerando esencial abrir una mesa de negociación para tratar las condiciones laborales del personal de la área sanitaria. La falta de profesionales y la carencia de espacios adecuados están incidiendo negativamente en el ambiente de trabajo, lo que aumenta la posibilidad de conflictos y situaciones de violencia.
"Es obligación de la gerencia garantizar que el entorno donde se presta la asistencia sea seguro", afirmaron los representantes de los trabajadores. Además, subrayaron que la gerencia debe asumir sus responsabilidades, escuchar a los empleados y mejorar las condiciones de trabajo.
